MOVE

MOVE, be a learning hero

Enfoque

La interdependencia de la actividad física, la nutrición, la concentración y el éxito en el aprendizaje son el enfoque de este proyecto. En la era digital, los niños y adolescentes de todos los grupos étnicos pasan más y más tiempo con consolas de juegos o teléfonos inteligentes que explorando activamente su entorno. La influencia del consumo de medios tecnológicos y la falta de ejercicio, no solo no son saludables, sino que también influyen negativamente en sus habilidades de concentración y sus éxitos de aprendizaje.

El proyecto tiene como objetivo mostrar a los estudiantes cómo mejorar sus habilidades de aprendizaje al ser sensibles a su nutrición y ejercicios físicos. De esta manera, el enfoque se subraya con la idea de que el aprendizaje puede ser divertido. Los estudiantes desarrollan estrategias propias frente a la teoría y la práctica, que combinan el ejercicio físico, la nutrición y el aprendizaje en su vida cotidiana. Los profesores inician métodos que se pueden usar en las lecciones. Además, los estudiantes aprenden una forma más sensible de tratar con la tecnología moderna al tomar conciencia de los procesos neurológicos (nomofobia, producción de dopamina, concentración, etc.) y dirigirlos activamente.

Especialmente los niños y adolescentes que crecen con tecnología moderna y un estilo de vida diferente (incluyendo actividades de tiempo libre, deporte, nutrición), tienen que lidiar con su salud física y psicológica y deben iniciar nuevos patrones de comportamiento más saludables y prometedores. Debido a que los estudiantes de entre 14 y 16 años se ocupan de estos temas, se puede suponer que los niños tienen muchos conocimientos en el campo de la escuela, el aprendizaje, el ejercicio físico y el uso de los medios que reflejan la realidad de manera auténtica.
Especialmente, estos estudiantes son expertos en evaluar el estado real y las necesidades de los estudiantes jóvenes a medida que crecen en un mundo tecnológico que a veces es extraño para los profesores. Estos recursos deben ser apreciados y pueden contribuir a nuevos enfoques que deben tomarse en serio.

Ampliando horizontes

Por un lado, los jóvenes tienen la experiencia de una comunidad internacional especialmente en un mundo globalizado y homogeneizado (marcas, demanda, etc.). Todos los estudiantes son parte de este mundo digital en el que están influenciados. Todos los estudiantes deben ir a la escuela y obtener buenas calificaciones. En el contexto escolar, deben dominar el equilibrio de las actividades de tiempo libre, la amistad y la familia para encontrar una forma adecuada y exitosa.

Por otro lado, existen grandes diferencias en el contexto escolar. ¿Cómo son las clases? ¿Cómo es la vida escolar? ¿Qué puedes almorzar? ¿Qué hacemos en el almuerzo? ¿Cómo lidian los profesores con los teléfonos en la escuela? ¿Cuándo puedo concentrarme bien / mal? Las diferencias y características culturales influyen en nuestra rutina diaria, lo que comemos y nuestra didáctica, especialmente nuestra propia percepción. Podemos beneficiarnos unos de otros y aprender lo que ya es bueno y lo que se puede mejorar. Tal comparación en múltiples perspectivas nos permite inspirarnos con buenos enfoques y experiencias para transmitirlas.
En el intercambio internacional de expertos adolescentes, el estado actual de una nueva generación puede ser entendido y utilizado para otros propósitos. La sensación de ser un portavoz de la propia generación y de desempeñar un papel importante en el desarrollo de nuevos enfoques escolares y de enseñanza puede ser motivador para los estudiantes y generar nuevas ideas creativas. Estas ideas pueden ser la fuente de nuevos enfoques, conceptos y modelos didácticos.